jueves, 10 de septiembre de 2009
Matahuasi
Tras abandonar la casa del abuelo tomé la ruta de Jauja, la margen derecha, y llegué a Matahuasi, esa capital lechera donde antes habían también muchas guindas y pencas para hacer barcos y meterlos por los riachuelos que riegan las chacras...
Fui a la Era y solo hallé toros comiendo y la hierba amarilla y seca, ya no había rastro del nido de abejorros que tanto miedo me daba cuando jugaba partido con los yayitos y joselitos.
En algún momento el cielo se llenó de nubes brillantes.
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2 comentarios:
Igual Gracias =)
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